Sueños de niños.

Las imágenes recorren su mente cuando él cierra sus ojos, una leve sonrisa se extiende poco a poco en su rostro mientras que sus manos escriben con velocidad en la computadora, nunca ha necesitado mirar el teclado. Sus dedos ligeros teclean con precisión cada letra sin error alguno, mientras imagina que hubiese sido de él si perseguía sus sueños.

Todas las mañanas él miraba con vivos ojos a través de la ventana aquel pequeño colibrí que se posaba sobre unas margaritas y se imaginaba volando por los aires como ese pequeño ser; poco después de eso partía hacía el colegio en compañía de sus padres y bajaba la ventanilla sintiendo como el viento golpeaba su rostro más como una caricia que como un rasguño como muchos decían, él sonreía y se imaginaba siendo jinete.

... quería tantas cosas, tantos sueños que parecían lejanos para un niño que poco a poco crecía. Sus amigos, como él, tenían sus propias fantasías uno quería ser médico y ayudar a todas las personas que él pudiera, sentir como los guantes cubrían sus manos mientras limpiaba una herida. Otro, deseaba ser político y cambiar el mundo en el que vivían y el último deseaba ser periodista para decirle a todos lo que ocurría en el planeta.

Pero poco a poco sus sueños y metas se fueron minando, fueron decayendo... él sabía que no sería piloto ni jinete, el otro no sería médico mientras que para el que deseaba ser político simplemente se quedaría como un bello sueño, pues le estaba vedado... y aquel pequeño periodista tendría que rendirse bajo las manos astutas de muchos sin poder lograr su sueño.

"Imposible", esa palabra resonó diario en sus cabezas durante toda su infancia y juventud, mientras el brillo de sus ojos se apagaba al ver como los demás seguían en el camino mientras ellos se detenían por x o y razones. Sus pasos se volvieron lentos y pesados, cuando uno se rindió totalmente, ¿qué caso tenía seguir si ya conocía su fin?, su poco entusiasmo desalentó a los demás pero aquel que soñaba con volar o ser jinete continuo.

Sin embargo, miraba atrás... veía a sus amigos observandolo, deseándole suerte y animándolo como no lo habían hecho con ellos. Él se entristeció, por un segundo pensó en regresar con ellos y acompañarlos, no podía dejarlos solos pero su sueño siempre había sido volar, y una gran oportunidad llegaba para él... una que no desaprovecharía.